jueves, 29 de junio de 2017

Carta a mi hijo

Para ti, hijo mío, es esta carta que lleva un aroma especial y único: un amor que no se compara con nada. Es lo más cercano al amor de Dios, es lo que siento por ti, mi hijo, mi sueño y mi realidad.
Soy tu madre, la que se enfada, la que ríe, la que te abraza cuando la vida no te trata bien…
soy muchas cosas para ti, pero sobretodo y por encima de todo, soy quien te ve como un hijo precioso, puedo mirar tus ojos y ver todo el mundo con sólo mirarte, eres mi prolongación, naciste con amor y así debes sentirte siempre.
Y si te escribo estas líneas es que nunca había sentido esta clase de amor, uno que se espera, uno que sé que no me dejará.
 Eres mi mitad, y mi corazón te pertenece para siempre.

Quiero lo mejor para ti, hijo;
quiero que lleves en tu corazón el amor del mundo, así serás un buen hombre y sabrás que a una mujer se le ama y se le respeta.
Te enseñaré a mirar con los ojos del corazón, así podrás distinguir el bien del mal. Quiero que seas mi orgullo, pues un día crecerás y tendrás tu propia vida, mientras tanto, déjame abrazarte y amarte como a nada en el mundo…
Un día te irás a formar tu familia y quiero que todos estén orgullosos de ti, que des el mismo amor que te fue entregado. 
Así seremos una familia que se formó bajo las normas de una vida feliz y llena de amor, para dar y repartir.

2 comentarios: