ORACIÓN A DIOS EN BÚSQUEDA DE CALMA

Padre mío, mi sosiego en días de tormento: 

Nuevamente vengo ante ti, suplicante y avergonzado de ello, pues siento que acudir así a ti es algo que se me está haciendo una inquietante y descarada costumbre. 

Vengo a ti buscando paz, porque reconozco que tengo necesidad de que me ayudes, y cuando acudo a ti logro dialogar conmigo mismo, recibir un poco de dirección que siento venir de ti, y lograr un poco de esa paz que tanto necesito. 

Debiera venir a ti a diario, también en los mejores días, buscando tu consejo y con mi corazón agradecido, pero he de confesar que no siempre es así, y cuando más problemas tengo es que más te busco. 

Perdóname por ello Señor. Aún me encuentro en búsqueda de la calma que necesito, pues estos días me han estado abrumando. 

Por ello he de pedirte que me inyectes de paciencia para que pueda encontrar todo lo bueno en todo esto que es bastante incómodo para mí. 

Si es necesario, Señor mío, dame paciencia, pues sé que es una virtud que me vendría bien empezar a cultivar y a utilizar mejor. 

Con paciencia y ayuda de tu parte, sé que podré sobrellevar mi barca en medio de esta agitada tormenta, y que así podré mantenerla como roble firme cuando lo azotan los huracanes, manteniendo la quietud cuando todo se derrumba a mi alrededor.